VIOLENCIA Y PROFANACIÓN.
Deseo expresar mi más profundo pesar, indignación, tristeza y gran enojo por el irrespeto y agresiones
violentas que sufrieron los sacerdotes, su eminencia Cardenal Leopoldo Brenes,
Monseñor Silvio Báez, Obispo Auxiliar y su excelencia Nuncio Apostólico Mons.
Waldemar Stanislaw, en la sagrada Basílica Catedral de Diriamba, por parte de
grupos fanáticos y paramilitares del gobierno tiránico de Ortega – Murillo.
Además de una humillación fue sobre todo y eso es lo más grave, una
profanación del templo y un irrespeto total a la investidura consagrada de los
religiosos como representantes de DIOS. Este acto sin duda alguna es también
otra ofensa más contra DIOS por el ataque contra su iglesia y así también
contra todos los católicos que somos un mismo cuerpo y sentimos en un mismo
espíritu en comunión con CRISTO.
Las palabras de Nuestro Señor en una de las bienaventuranzas donde
afirma:”Felices los que sufren persecución y acusaciones falsas en mi nombre,
alégrense porque será grande la recompensa en el cielo”, siempre serán un
bálsamo para curar nuestra aflicción y renovar nuestra esperanza a pesar del
horizonte tormentoso que vivimos. Los poderes del mal no prevalecerán sobre
nuestra iglesia, también ha sido una promesa del Señor y vemos cómo por más de
dos mil años se ha cumplido su palabra. DIOS bendiga a nuestros obispos, a
nuestros sacerdotes y a toda nuestra iglesia católica. Me siento orgulloso de
ser católico.
UNIDAD Y SOLIDARIDAD HISTÓRICOS.
Desde hace mucho tiempo no se miraba en los nicaragüenses sentimientos
de unidad, cohesión, coordinación espontánea, masiva y sobre todo solidaridad.
Habíamos perdido estos valores humanos y nos habíamos encaminado por el
salvajismo en la jungla de concreto, del egoísmo y el individualismo bajo lema
de “sálvese quien pueda, ese no es mi problema, eso no es asunto mío”. Estos
eran anti valores que no identificaban al verdadero nicaragüense que hoy bajo
las circunstancias más adversas está sacando lo mejor de sí mismo para
compartirlo y ofrecerlo solidariamente con sus hermanos que sufren la
sangrienta y bestial represión genocida, fascista y fanática inhumana del régimen tiránico, sin escrúpulos
ni mínimo respeto por nada, más que a la figura mesiánica con delirios de
grandeza de la pareja presidencial.
La gran pregunta es cómo se puede dialogar o negociar con alguien tan
obstinado que no tiene la mínima voluntad de ceder, sino todo lo contrario
mantener sobre tumbas y cadáveres su totalitarismo ideológico, intolerante,
sectario, excluyente y marginal.
Sucede que la respuesta no vendrá ni rápido ni mágicamente puesto que
estamos lidiando con un individuo en el poder acostumbrado a tratar con
desprecio y soberbia a todo el que no se le arrodilla, un paranoico violento de
alta peligrosidad quien no siente remordimientos ni pesar por sus crímenes. No
importa que sean cientos o miles, para él son menos que animales, no son
personas ni mucho menos ciudadanos nicaragüenses con derechos humanos y
garantías constitucionales. Para él somos ganado y dispone de nuestras vidas.
Esperemos que por fin el pueblo de Nicaragua aprenda la lección y nunca
más permita subir al poder a otro Ortega, el dictador que ha perpetrado la peor
masacre de la historia bajo un mundo de infamia, maldad absoluta, inventando
todo tipo de mentiras, calumnias y falsedades contra su propio pueblo al cual
criminaliza y reprime sin piedad o compasión.
También es evidente por muy doloroso que parezca, que después de la
masacre del 30 de mayo, la sociedad civil democrática en su conjunto ha perdido
iniciativa y está dando síntomas de agotamiento, muchos pobladores empiezan a
desesperarse y el temor aumenta a medida que la represión es con más barbarie,
sin ley ni respeto. Por otro lado la alianza cívica carece de total conducción
política que funcione a una sola voz y que se mueva con rapidez a la misma
velocidad o más de la que Ortega actúa. La retirada no es una opción pero sí un
alto para reflexionar y reorganizar fuerzas y estrategias de lucha para
acelerar la caída de la dictadura. La formación de una junta de gobierno es
vital para que pida el reconocimiento internacional e ir desplazando al actual
régimen inconstitucional, ilegítimo e ilegal, si el diálogo nacional llegase a
fracasar.
Resulta impostergable la unión de todos los sectores de la vida nacional
que se sabe adversan al gobierno y poder formar un conglomerado sólido, amplio
y muy representativo. Nadie sale sobrando ni nadie estará estorbando, el objetivo
principal es la democratización del país
y justicia para los caídos. No es tiempo
de excluir, es tiempo de sumar por la patria.
Ortega a pesar de los golpes que ha recibido, aún es muy astuto y sobre
todo, muy peligroso. Es alguien acostumbrado a la lucha prolongada, sufrió
cárcel muchos años de manera que no se impresiona fácilmente, estuvo exiliado
mucho tiempo y aunque jamás disparo un solo tiro, es alguien que conoce la
guerra y le gusta, como en los años ochenta mientras hablaba de paz al mismo
tiempo continuaba atacando para sacar el mayor provecho posible y la mejor
ventaja para negociar con fuerza y anteponerse a sus adversarios. Él siempre
está en guerra y todo mundo es su enemigo que debe aniquilar, por eso no dará tregua alguna.
Una vez más insisto que solamente DIOS puede ayudarnos a salir de este
tirano. Ya una vez nos hizo el milagro pero no lo valoramos y ahora será más
difícil conseguir otro, pero no imposible. Dios espera que acudamos a ÉL con
humildad, doblando la rodilla ante su presencia, con perseverancia y sobre todo
confianza en su amor y poder. Si no lo hacemos así, no triunfaremos nunca. Dios
no es lo que a veces queremos aplicarle a nuestra conveniencia, es decir
suplicar de emergencia como si ÉL fuera bombero o un socorrista de la cruz roja
y después que conseguimos lo que nos da, nos olvidamos de él y regresamos al
carnaval de soberbia y egoísmo en nuestras vidas. Con el Señor no funciona el
trueque o el cambalache, funciona el compromiso de fe y de amor. DIOS SALVE A
NICARAGUA.
BITÁCORA NACIONAL DE NICARAGUA.
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lucro para todo público.
EL PORTAL DE LA OPINIÓN.
TRINCHERA DEL PENSAMIENTO.
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Espinoza.
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Lic. Francisco Urbina Carrillo.
JULIO 2018.
