sábado, 25 de enero de 2020



IMÁGENES RETRO RECUERDOS DE LA NICARAGUA DEL PASADO.


VAPOR VICTORIA EN LAGO DE GRANADA. 1910.

VAPOR MANAGUA EN EL RÍO TIPITAPA. 1905.

CAMPOS DE SEMBRADÍO DE ALGODÓN EN LEÓN. 1955.

CONO DEL VOLCÁN COSIGUINA. 1960.


MONUMENTO A RUBÉN DARÍO. MANAGUA. 1936.



jueves, 23 de enero de 2020




IMÁGENES DE SALTOS DE AGUA EN JUIGALPA CHONTALES. NICARAGUA.EN ÉPOCA DE INVIERNO CON COPIOSAS LLUVIAS.
BELLEZAS NICARAGUENSES.

lunes, 20 de enero de 2020

¡QUÉ FACIL ES OLVIDAR!

Resulta tan fácil olvidar como parte de la ingratitud  con que pagamos en nuestra vida a todas aquellas personas que por alguna razón les debemos mucho y al mismo tiempo somos complacientes en nuestro recuerdo con quienes nos hicieron daño.

Voy a referirme específicamente en este caso a la ideología rojo y negra del frente sandinista como expresión partidaria, de gobierno y fuerza punitiva de una tiranía desmedidamente indecente, brutal y obscena en la explotación y saqueo de los recursos del país y del estado, así como siniestra en su maldad extrema para cometer crímenes de lesa humanidad tratando de justificarlos a base de miles de mentiras y manipulaciones.

Es sorprendente cómo resulta fácil olvidar que esto lleva sucediendo desde hace más de cuarenta años con escasas voces de protesta que señalan los hechos por su nombre.

Los empresarios y el gran capital se olvidaron que el mismo hombre con el  que hicieron trato y negocios privilegiados en los últimos diez años, fue el mismo quien los despojo en el pasado de sus bienes, empresas y capitales y los obligo a ir al exilio a barrer las calles y lavar inodoros como pobres asalariados sin derecho de reclamar.

Los trabajadores olvidan que antes como ahora, bajo su tiranía no tuvieron, ni tienen ningún derecho de protestar por mejores salarios o condiciones de trabajo, ni menos por un trato más digno. Los empresarios más explotadores y que dan mucho mal trato al obrero son precisamente los sandinistas, cobijados en su discurso populista y demagógico.

Los jóvenes habían olvidado en su mayoría que en los años ochenta los envió  a combatir y morir a las montañas como carne de cañón por miles y en el presente los sigue sacrificando como animales en cacería.

Las mujeres no recordaban que mancillo su dignidad y honorabilidad al arrebatarles la paz en sus hogares  y sus derechos naturales de ser esposas y madres gracias al totalitarismo ideológico y por las prácticas de sometimiento total a una fuerza machista del estado revolucionario.

La niñez fue manipulada bajo una enseñanza guerrerista donde todo debía ser sometido por la fuerza de las armas justificando  el odio a muerte.

La iglesia le dio la mano e hizo amistad con el gobernante, que siempre los aborreció y pretendió eliminarlos como fuera moral y de conciencia, porque sabía que le estorbaban en sus oscuros propósitos de instaurar una dictadura sangrienta y totalitaria a como lo ha logrado en el presente.

Las fuerzas armadas que juraron defender la bandera azul y blanco contra toda amenaza de destruirla, son los mismos que ayer en la guerra civil y hoy en la dictadura, la han manchado de sangre inocente sin ningún remordimiento o pudor, con todo cinismo y descaro, tratan de ocultarlo y además justificarlo, auspiciado y animado por el dictador maligno.

Los profesionales, los técnicos, los emprendedores y propietarios de negocios pequeños no tenían trabajo y no podían llevar el gasto para mantener a su familia, no había pan en la mesa en ese entonces, como tampoco lo hay ahora en el presente bajo la bota de opresión del mismo que se ha enriquecido con creces y disfruta el derroche en la abundancia, despilfarrando el dinero en lujos extremos, endeudando más al país, mientras el pueblo sufre por no comer y pagar altos costos de la vida.

Y aún así desean dialogar con él y negociar elecciones que nunca querrá dar con honestidad y transparencia. Es inmoral negociar con el verdadero terrorista y asesino. Han perdido el horizonte solo por ganar votos en lugar de luchar para sacarlo del poder. La gente no irá a votar sépanlo.

DIOS hará el milagro como en 1990 pero hasta que el pueblo se lo merezca y se lo haya ganado con honestidad y pureza de intenciones. No sigan tomando decisiones que por su orgullo, afectan al pueblo.

Ing. Marlon José Navarrete Espinoza.
20 de Enero de 2020.





sábado, 11 de enero de 2020

LOS MARGINADOS DE SIEMPRE QUE MÁS SUFREN LAS INJUSTICIAS.

Más de 40 años de impunidad, donde no hay castigo ni pena para el criminal que asesina a humildes campesinos. Los mismos desdichados campesinos tan maltratados, humillados al igual que excluidos de toda oportunidad de vivir en paz en su tierra, gozar tranquilidad en su humilde hogar sin sentir su vida en peligro de muerte o se le roben sus pocos animalitos junto a su choza o ranchito. Más de 40 años de impunidad  para aquel poderoso que chantajea y despoja tanto como con coerción como con amenazas al solitario ciudadano que no tiene influencias políticas o amigos potentados. Todo esto es el mal ejemplo que sin consecuencias enseña la actual dictadura, sin escrúpulos, sin límites de decencia o de compasión por su pueblo, mucho menos decir que una pizca de amor o pesar por su dolor y sufrimiento.

Sumemos a todo esto a las madres humildes, las mujeres que les toca enfrentar solas a la vida diaria que no tiene piedad en medio de una sociedad indiferente y también llena de políticos oportunistas, aprovechados, arribistas y vividores que se presentan con una máscara de virtudes y un disfraz de rectitud, pero por dentro son carroña y perdición.

Ya no basta el obsceno terrorismo de estado de la actual tiranía, la violación de todos los derechos constitucionales sino que hay que tragarse la destrucción total de la vida honesta que debiera de estar reflejada en una institucionalidad pulcra, vocación de servicio y una justicia social en el estado que dignamente asume sus responsabilidades y las cumple.

Durante la dictadura de Somoza, cuando ocurrían ejecuciones sumarias, un odioso coronel de la guardia, Jerónimo Linarte, expresó que: “a los ricos se les toma como rehenes para negociar el poder y a los pobres se les mata”. Si derivamos sus palabras significa que el humilde, el trabajador, el campesino, los estudiantes, los desempleados, todos los marginados de la sociedad, son los que siempre ponen los muertos y los que gozan del poder en las cumbres del gobierno, celebran con fiestas y opulencia grotesca  con licores finos, que mancillan la honra del pueblo.

Pero del otro lado, de muchos que se dicen demócratas y que luchan por la libertad, en realidad, son todo lo contrario de lo que afirman ser. Su pasado los delata y su doble moral los señala con el dedo acusador. Ellos también son un peligro y una amenaza para la futura libertad democrática que se pretende conquistar. 

Mientras hay unos que sacrifican todo, hay otros que no sacrifican nada y le quieren cobrar a la patria con creces su falsedad.  Muchos de ellos fueron viles violadores de derechos humanos sin remordimiento alguno, muchos usaron el tráfico de influencia partidaria para despojar de su propiedad a quien no era del partido de gobierno, como en mi caso, a mi difunto padre, quien fue despojado por Edgar Parrales en los años ochenta y noventa, usando su influencia del poderío rojo y negro en la corte suprema. Esos violadores de ayer, son los supuestos defensores de hoy, son fuertes contra el débil y débiles ante el poderoso. Todos ellos fueron parte de la demencia agresiva en la aterradora realidad de la guerra en los años ochenta con el pueblo subyugado por el comunismo muriendose de hambre y ellos en la abundancia sin perecer.

Como un simple ciudadano insisto, que no se desvíe el verdadero objetivo de la insurrección civil de abril de 2018, que es la salida del poder del régimen de Ortega y quienes creen que un día ofrecerá generosamente elecciones libres y honestas, se están engañando a sí mismos y cayendo en el error de jugar a la democracia con el dictador o de transar con una dictadura brutal que jamás quiso ceder en nada.

Igual que ellos ayer, la dictadura, actualmente muestra un muro de vidrio y no de concreto. Atravesar ese muro ha significado que muchos salgan heridos de muerte. Pero una transformación con justicia reclama soportar serenamente las contrariedades y no desfallecer nuestra confianza en DIOS, ya sabemos que no se puede construir una nueva sociedad sin Él porque entonces será otro gran fracaso para el país. No debemos permitir la desintegración familiar por ideologías extrañas o ajenas a nuestra identidad y tradición, cristiana y católica. Si pretenden dejar a DIOS afuera marginado y excluido como sucede con nuestros campesinos y pueblo humilde, entonces todo se derrumbará como la torre de Babel.

Ing. Marlon José Navarrete Espinoza.
11 de Enero de 2020.



miércoles, 8 de enero de 2020

CASCADAS CERCA DE JUIGALPA, CHONTALES.

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AÑO NUEVO, ESPERANZA RENOVADA.

PROSPERIDAD, ESTABILIDAD, PAN EL MESA, PAZ FAMILIAR Y SOCIAL, AFECTO POR LO ESPIRITUAL Y LA PIEDAD JUNTO A LA SOLIDARIDAD, PERO SOBRE TODO ENCONTRAR UN CAMINO DE REALIZACIÓN DE SUEÑOS Y METAS.

ESTOS SON SINCEROS Y MEJORES DESEOS DE AÑO NUEVO 2020.